Tras un pasado de adicciones y tocar fondo en su vida, Coral Mujaes, coach líder en empoderamiento, cambio radical y negocios nos compartió durante su participación en el WORTEV Rise Day los cinco pasos para cambiar tu vida y alcanzar una transformación radical.
Después de probar con terapias convencionales y procesos largos con los que no se sentía satisfecha para lidiar con sus problemas personales como adicciones y bulimia, Coral conoció a su primer mentor, quien le ofreció las herramientas para lograr cambios desde el primer día.
Estas herramientas son aplicables para cualquier persona que quiera transformar ciertos comportamientos que evitan su desarrollo pleno. En esta charla, Coral enlistó las herramientas en forma de pasos para cambiar tu vida radicalmente.
Estos son los 5 pasos para cambiar tu vida:
1. ¿Qué quieres cambiar?
El primer paso es identificar en qué áreas específicas quieres lograr esta transformación. Para lograrlo, necesitamos claridad. Existe un dicho que dice “La claridad es poder” y mientras más claridad tengas en qué quieres cambiar, será más sencillo conseguirlo.
Pregúntate en específico ¿cuál es el comportamiento, situación o cosa que quieres transformar? Este enfoque te permite ser consistentes en una situación que abre los pasos para cambiar tu vida.
2. Enfócate en un cambio a la vez
Es posible cambiar toda tu vida, pero no buscando hacer todo al mismo tiempo. Un cambio a la vez, porque cada cambio requiere tu presencia, tu energía, espacio mental, fuerza de voluntad. Gástate todos estos recursos en un solo cambio y después vas por los que siguen.
Cuando deseamos hacerlo de la forma contraria e intentar cambiar varias cosas a la vez, resulta abrumador. Este es el motivo por el que muchas veces desistimos.
El primer cambio puede ser largo, porque aún no tienes los “músculos” necesarios para crear una transformación. Sin embargo, conforme trasciendes una meta, te vas volviendo más rápido para las siguientes, porque ya has desarrollo las habilidades para lograrlo.
3. Encuentra tus razones, un porqué
El tercero de los cinco pasos para cambiar tu vida es el porqué. Cuando ya aseguraste qué quieres cambiar y tienes una idea clara, llegan los retos. Las tentaciones, la incomodidad por hacer ese cambio causa dolor. En ese momento debemos afianzarnos a nuestras razones, al porqué, a las motivaciones reales que nos mueven el alma. Esas herramientas son a las que nos aferraremos cuando queramos soltar la toalla.
Cuando tomamos la decisión de cambiar algo, habrá días en los que no vamos a tener la misma motivación, por eso será importante regresar a nuestro porqué. En este momento, querer cambiar se vuelve en un absoluto, no existe plan B.
4. Comprende por qué tienes ese comportamiento
La pregunta correcta no es ¿qué hay de malo con estos comportamientos?, sino que es ¿qué hay de bueno en estos comportamientos? Cuando nos inclinamos hacia estos comportamientos autodestructivos constantemente es porque ahí encontramos una ganancia o un beneficio. Por lo tanto, hay que saber qué es lo que recibimos a cambio.
Todo comportamiento nos da un servicio. Identifica la situación positiva que me da cierto tipo de actitudes y cómo puedo satisfacerla de otra forma, sin ese comportamiento negativo o el vehículo que no está alineado.
5. Haz del cambio algo simple y fácil
El último de los pasos para cambiar tu vida se trata de la simplicidad. La complejidad es el enemigo de la ejecución y lo único que realmente va a generar cambios es la ejecución. Si tu cerebro ve este cambio como algo muy difícil o algo que está muy lejano o imposible, no lo vamos a hacer.
Si tu cerebro no tiene evidencia de que es posible, no va a dar su potencial absoluto. El “medio intentar” crear un cambio, nos dará “medio resultados”. Es muy importante que cuando estemos hablando de crear un cambio, no nos vayamos de 0 a 100, vamos de uno en uno, paso a paso. Todos los días con acciones que te permiten acercarte un poco más a la meta.
Tanto en la vida como en el emprendimiento aplican estos pasos. Anticípate a escribir por qué quieres emprender, identifica los retos y no busques irte de cero a 100 de inmediato.