Con la evolución constante de la cultura laboral, se ha generado un cambio significativo en la forma en que las empresas abordan la selección de personal. Ahora, más que nunca, se priorizan las habilidades blandas y se fomenta una mayor sensibilización entre los líderes. Esta transformación ha dado lugar a un intenso debate sobre qué es más valioso entre la experiencia y competencias laborales.
Hasta hace pocos años, la experiencia y las credenciales académicas solían ser los criterios dominantes para la contratación, pero hoy en día, las cosas han cambiado radicalmente.
Se estima que para el 2030 habrá una escasez de talento que dejará más de 85 millones de puestos de trabajo sin cubrirse. Esto, precisamente, por la falta de capacitación para ejercerlos, de acuerdo con el estudio 2030: The Very Human Future Of Work de Korn Kelly.
Dado que cada empresa posee sus propias particularidades y demandas, es esencial comenzar por identificar los requisitos específicos de tu negocio y las habilidades necesarias que tu equipo de colaboradores debe poseer.
A continuación, te ofrecemos un análisis detallado de las características asociadas tanto a la experiencia como a las competencias laborales, permitiéndote así tomar una decisión informada de acuerdo con tus objetivos empresariales. Es fundamental tener en cuenta que la preparación para enfrentar y adaptarse a los desafíos cotidianos es clave en cualquier estrategia de contratación.
A partir de la crisis sanitaria de 2020, en los procesos de selección de personal se ha observado un cambio significativo hacia la valoración de las competencias específicas de los candidatos por encima de los tradicionales currículums.
De hecho, para el 81% de los reclutadores, la contratación basada en habilidades y competencias, es más efectiva que la evaluación a partir de únicamente currículums, según el estudio The State of Skills-Based Hiring 2024, elaborado por TestGorilla, empresa de software para pruebas preempleo.
Se ha demostrado que este enfoque facilita la identificación de talentos más adecuados para los puestos disponibles, proporcionando mayores beneficios para las empresas. El 94% de las organizaciones que adoptaron esta práctica reportaron una mejora en la retención de personal, lo que sugiere una mayor satisfacción y adecuación de los empleados en sus roles, explica el estudio.
No obstante, existen otros rubros en donde la experiencia representa parte importante del valor agregado en la contratación de personal. Tal es el caso de la cadena de comida rápida Popeyes, que lanzó una campaña con motivo de la celebración por su 50 aniversario, para abrir vacantes a personas mayores de 50 años con este mensaje: “buscamos gente de 50 que sepa hacer las cosas a mano y con amor”.
La decisión de Popeyes, además de ser estratégica, también representa una oportunidad de empleo para las personas mayores, ya que el 10% de la plantilla laboral de la organización se conforma por personas de 50 años y más.
Entonces, ¿de qué va cada concepto?
La evaluación de competencias es un proceso estructurado y sistemático que determina si los candidatos poseen las habilidades, conocimientos y actitudes necesarias para desempeñar un rol específico dentro de la empresa.
A diferencia de evaluaciones tradicionales, que suelen enfocarse únicamente en las calificaciones escolares o experiencia laboral previa, la evaluación de competencias centra su atención en un conjunto más amplio de capacidades relevantes para desempeñar el trabajo.
Al implementar la evaluación de competencias durante el proceso de reclutamiento, las empresas obtienen diversos beneficios:
Incluyen conocimientos y habilidades específicas relacionadas con las tareas y responsabilidades del puesto. Por ejemplo, para un desarrollador de software, las competencias técnicas pueden incluir el dominio de lenguajes de programación específicos como Python o Java.
También conocidas como habilidades interpersonales, abarcan aspectos como la comunicación, el trabajo en equipo, la adaptabilidad y la capacidad de resolver problemas. Se consideran esenciales, pues garantizan que el candidato trabajará eficazmente dentro de la cultura organizacional, trabajará en equipo y contribuirá positivamente.
En los roles gerenciales y de supervisión, las competencias de liderazgo son de suma importancia. Estas incluyen capacidad para la toma de decisiones estratégicas, gestión para el impulsar el cambios, así como inspirar y motivar a su equipo.
En un entorno empresarial en constante cambio, la capacidad de adaptarse y aprender nuevas habilidades es vital. Esta categoría evalúa cómo un candidato maneja situaciones nuevas y se ajusta a cambios en el entorno de trabajo. También la creatividad, agilidad para aprender y asimilar nueva información, así como la capacidad para dar respuesta a diversas situaciones.
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La experiencia laboral es, por tradición, una de las primeras opciones a la hora de reclutar personal. Este término se refiere al conjunto de habilidades, conocimientos y competencias adquiridas por una persona a través de su participación en diversos empleos. Normalmente, la experiencia en el mundo laboral se documenta en un currículum vitae (CV), éste es un recurso muy usado tanto para empresas como para trabajadores.
Los beneficios de un enfoque en experiencia laboral para la selección de personal son:
La selección de personal es un proceso importante dentro de las empresas, ya que influye directamente en su desempeño y éxito a largo plazo. Los enfoques predominantes para llevar a cabo este proceso son la consideración de experiencia laboral y la evaluación de competencias. Pero, ¿cuál es la más adecuada?
Ya te contamos de qué se trata cada uno de estos enfoques y ambos tienen sus ventajas y limitaciones. Por ejemplo, la evaluación de competencias impulsa el desarrollo del talento, alineándose a los objetivos estratégicos de la empresa y a las exigencias que el actual entorno exige.
Por otro lado, la experiencia laboral proporciona una base sólida y probada de habilidades y conocimientos prácticos. Con lo que se asegura la integración del nuevo personal al equipo de trabajo, al mismo tiempo que crece la credibilidad de la organización.
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Experiencia | Competencias | |
Enfoque y alcance | Se centra, principalmente, en el historial de trabajos previos y habilidades adquiridas en esos contextos específicos | Adopta una visión global del candidato. Considera su experiencia, así como habilidades específicas y su capacidad para alinearse a la cultura de la empresa. |
Integración y desarrollo | Acelera la integración inicial, pero no necesariamente ofrece un camino claro para el crecimiento y la adaptación a nuevas competencias requeridas para la evolución del puesto o la organización. | Facilita la selección y también el desarrollo continuo de los empleados, pues promueve la movilidad interna y el crecimiento profesional. |
Adaptabilidad y futuro | Proporciona una base sólida para la toma de decisiones y la resolución de problemas. Sin embargo, esto puede no ser tan efectivo a la hora de preparar a los colaboradores a cambios estructurales significativos. | La evaluación de competencias, especialmente las de adaptabilidad, prepara mejor a los empleados para enfrentar cambios y desafíos futuros. |
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Seleccionar personal a partir de la experiencia y competencias laborales no debe ser un problema para las empresas. Más bien, es una valiosa oportunidad para combinar lo mejor de ambos enfoques. Las empresas que logren equilibrar las habilidades prácticas adquiridas a través de la experiencia con la adaptabilidad y el potencial de desarrollo de las competencias estarán mejor preparadas para enfrentar los desafíos futuros con éxito.
Al final, la clave reside en la formación de equipos diversos que puedan aprovechar sus fortalezas colectivas. Así como adaptarse a los cambios y contribuir a la innovación y al crecimiento sostenido de la organización.
En WORTEV contamos con un equipo de especialistas en selección de personal preparados para asistirte en este importante proceso. No dudes en contactarnos para obtener más información y descubrir cómo podemos ayudar a tu empresa a alcanzar sus objetivos de contratación de manera efectiva.
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