Gabriel Murillo es el CEO al frente de Offlander, una marca que apuesta por una transformación de la industria del calzado en México con la fabricación y venta de botas urbanas sin género.
El emprendedor nació y creció en una familia de emprendedores dedicados a la elaboración de calzado en León Guanajuato. Esta ciudad es reconocida como “la capital del calzado en México”. El 70% de la manufactura nacional proviene de León, según la Secretaría de Economía.
A nivel mundial, México es el noveno productor de calzado y solo en 2019, la producción nacional superó los 250 millones de pares. Se generaron más de 215 mil empleos en este rubro, de acuerdo con la Cámara de la Industria del Calzado del estado de Guanajuato (CICEG).
Consciente del valor de esta industria, hace 10 años Gabriel dejó León y viajó a la Ciudad de México para alcanzar su sueño: su propia marca de calzado. El emprendedor recuerda que observaba algunas oportunidades que otras empresas dejaban pasar, por lo que él decidió poner manos a la obra.
El éxito no siempre llega al primer intento
Una de las primeras lecciones que Gabriel aprendió fue que, aunque conociera la industria del calzado desde niño, eso no garantizaba el éxito de una empresa. Después de varios tropiezos como pérdidas económicas y sociedades fallidas, encontró su área de oportunidad.
Detectar nichos desatendidos es parte de la labor de todo emprendedor y Gabriel apostó por un mercado poco competido: zapatillas para la comunidad LGBTTTIQ+. Este calzado debe caracterizarse por ser resistentes, de alta calidad y, sobre todo, buen diseño en tallas grandes. Así nació su primera marca, Miranda Queens.
Una vez que dominó el segmento y con mayor conocimiento de las necesidades, surgió Offlander. El año 2018 marcó el nacimiento de la primera marca de botas urbanas sin género y fabricadas en su totalidad por manos mexicanas.
Sin género, una tendencia global
Lo que antes se conocía como Unisex, hoy se reconoce a nivel mundial como moda sin género o genderless. Esta tendencia recientemente ha tomado mayor fuerza con la intención de dejar en el pasado las identidades impuestas entre femenino y masculino. El enfoque de esta moda es expresar la personalidad en un espectro más amplio de género.
De acuerdo con el fundador y director general de Offlander, la intención de la marca es romper los paradigmas existentes en la industria del calzado y ofrecer un producto para todos los gustos y estilos. Comparte que las pocas empresas existentes son mayoritariamente extranjeras y se especializan en un segmento rockero, punk o rebelde.
También te recomendamos: Modelo de negocio de Netflix. Estos son los secretos de su éxito
El mayor diferenciador de Offlander es la personalización. “Nuestros clientes son consumidores que no han encontrado un calzado a su gusto”. Por lo cual, Gabriel y su equipo se han dedicado a escuchar ideas y crear modelos únicos, que les permitan contar su historia a través del calzado.
Actualmente Offlander tiene una gama de 30 diseños, con la posibilidad de personalizar y hacer combinaciones entre colores, materiales, texturas, impresiones y bordados. Todo el proceso es hecho en México y su valor agregado es la calidad, el confort, costos accesibles y gran espectro de tallas que van del 15 al 30 (números mexicanos).
Offlander y su modelo de negocio
A pesar del gran potencial del negocio, en sus inicios hace tres años, la marca se enfrentaba a grandes retos, entre ellos, la falta de capital. Asimismo, el crecimiento acelerado de las redes sociales y la poca experiencia de Gabriel en este rubro, limitaban su alcance en marketing y ventas.
Con esta necesidad y después de tocar varias puertas, el emprendedor llegó a WORTEV, aceleradora y fondo de capital para impulsar su empresa. Denis Yris, fundador y director de WORTEV comparte que Offlander despertó su interés gracias a que más que un producto, es un trabajo artesanal que necesitaba el empuje para crecer.
Esto te interesa: 10 ideas de negocio de baja inversión para emprender
Y justamente era lo que podía ofrecerle WORTEV. Con ayuda de un equipo multidisciplinario y especializado lograron optimizar su crecimiento en menor tiempo y de esta forma, incrementar sus ventas. “El emprendedor muchas veces se pierde por enfocarse en vender, nosotros estamos para apoyarlo en el resto de las áreas y ser un parteaguas en su negocio”, agrega Denis.
Algunos de los resultados que Gabriel Murillo ha implementado a partir de esta aceleración e inyección de capital fue la creación de su tienda en línea, así como mayor proyección de su marca. Actualmente Offlander trabaja en elevar a 90 el número de modelos disponibles, así como la venta a todo México, Estados Unidos y Canadá, gracias al incremento en su capacidad de producción.
Los retos de la industria del calzado frente a la pandemia
Entre marzo y mayo de 2020, la categoría de moda y calzado presentó una caída en consumo de 63%. Mientras que el PIB de la fabricación de calzado decreció -12.2 y -78.9% en el primer y segundo trimestre del año, respectivamente, de acuerdo con la CICEG.
Para reponerse a esta dolorosa caída, expertos de la misma cámara aseguran que el comercio electrónico se convertirá en el mayor generador de dinamismo para la distribución interna y externa de la Cadena de Valor del Calzado (CVC).
Offlander encaminó sus esfuerzos en fortalecer su canal digital. Entre sus proyecciones con esta estrategia, planean posicionarse en línea con un crecimiento de 5% mensual. Su plan conservador a cinco años es vender entre 15 y 20 mil pares de botas al mes.
Entre los planes a futuro, Gabriel compartió algunas sorpresas como el lanzamiento de su línea de botas de piel genuina para bikers “resistentes para motociclistas, pero nobles para cualquier gusto”. Así como una línea de ropa, botas para nieve y ediciones limitadas de botas diseñadas por artistas mexicanos de disciplinas como grafitti, plástica, tatuaje y artesanía wixárica.
Así como Offlander se abre paso en la industria del calzado, tu emprendimiento también puede despegar con el apoyo y respaldo de WORTEV.