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Código de conductaApostar por la tecnología en la agricultura se convierte en una oportunidad para los emprendedores ante el cambio climático y el creciente aumento de la población.
México es líder en el sector agrícola y cada año crece su participación. En 2021, la producción agrícola cerró con 268.4 millones de toneladas de alimentos del campo, 1.3% más que en 2020. Y se espera que para 2022, se alcance un volumen de 273.3 millones de toneladas, de acuerdo con la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural.
Asimismo, somos una potencia exportadora en la industria agroalimentaria. Los agronegocios de México exportan a más de 100 países que nos posicionan como séptima fuente de alimentos más grande del mundo y la tercera de Estados Unidos.
Las condiciones climáticas de México, permiten la cosecha de 200 cultivos a lo largo del año. De acuerdo con el reporte ‘Panorama Agtech en México’ elaborado por aceleradora Endeavor, nuestro país es el octavo país del mundo con mayor superficie dedicada a la siembra con 26 mil 574 millones de hectáreas.
Ante un crecimiento de población estimado por el Banco Mundial en 9 mil 676 millones de personas para el año 2050, se requieren nuevas estrategias sustentables y eficientes para atender la demanda sin perjudicar aún más el medio ambiente.
De hecho, en cinco de los 17 Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) de la ONU, la agricultura es un eje clave. Los ODS de la Agenda 2030 impulsada por la Organización de las Naciones Unidas, enlistan los 17 problemas sociales y ambientales que requieren acción inmediata, por parte de la sociedad, gobiernos y empresas.
Los cinco objetivos ODS ligados a la agricultura son:
La agtech -como también se le conoce- es la clave para lograr estos objetivos, pues la tecnología agrícola es vital para elevar la producción de alimentos en más del 70% para el 2050. El agrotech permite integrar la tecnología en la agricultura con el fin de darle solución a los problemas más comunes del campo como: la escasez de agua, las plagas y las enfermedades de los cultivos.
La tecnología en la agricultura, también conocida como agrotech o agtech se refiere a incorporar tecnología en los procesos tradicionales de cultivo, riego y mantenimiento de la siembra para hacerlos más eficientes y sustentables.
De acuerdo con el reporte de Endeavor, el uso de la tecnología para los agronegocios será una de sus implementaciones más relevantes en los próximos años, a la par que en la salud o healthtech.
Actualmente, esta oportunidad ya ha sido aprovechada por empresas que experimentan con tecnologías en algunos puntos de la cadena productiva agrícola.
La recolección de datos permite minimizar riesgos y aumentar la productividad. Por ejemplo, para identificar el mejor momento para cosechar y optimizar costos o proporcionar información climatológica y monitoreo de suelo en tiempo real para recomendar especificaciones de riego o fertilizantes para cada tipo de cultivo.
Este tipo de desarrollo permite aplicar la tecnología en la agricultura de diversas maneras. Entre ellas, monitorear de forma remota los cultivos y prevenir plagas, así como incluir la robótica en la cosecha con el fin de automatizar el proceso. Con la instalación de sensores, es posible conocer el estado actual de los cultivos y anticipar fenómenos meteorológicos para facilitar la toma de decisiones.
Esta tecnología se relaciona con la inteligencia artificial, su propósito es optimizar costos con la automatización de tareas, como el uso de drones para monitorear cultivos, desarrollo de tractores autónomos, cosechadores robóticos, riego automático o robots de siembra.
Por ejemplo, en Reino Unido hay una cosechadora robótica capaz de recolectar una fresa cada dos segundos. En comparación, un humano logra entre 15 y 20 frutos por minutos. Tan solo una tercera parte, según revela NXTAgro, empresa mexicana de agrotech.
La cadena de bloques como parte de la agrotech funciona para procesar información de manera encriptada para evitar intermediarios y procurar su seguridad. Por ejemplo, gestión de información de clientes y proveedores, registrar ineficiencias en el proceso productivo.
Recientemente, en seguridad alimentaria para rastrear más fácilmente el origen de alguna plaga o fuente de contaminación. Por otra parte, en la asignación de precios justos entre la oferta y la demanda y salvaguardar la seguridad en transacciones.
Las empresas que utilizan esta tecnología en la agricultura representan al 27% de las startups registradas como agtech, de acuerdo con Endeavor. La biotecnología consiste en utilizar organismos vivos para mejorar productos o servicios. En este caso, resolver problemas de producción agrícola como la resistencia a plagas, condiciones abióticas adversas como la sequía y el frío. Así como aumentar el valor nutricional de los alimentos.
Estas nuevas tecnologías aplicadas a la agricultura utilizan sensores para la siembra y fertilización del campo. También logran analizar los datos sobre fenómenos climáticos para mejorar el riego y aumentar el potencial productivo de cada cosecha.
La tecnología digital aplicada a la agricultura permite mejorar la distribución de los productos derivados del campo ofertando en el mercado online y no solo en el tradicional. Así como integrarse a las cadenas productivas globales, siendo más competitivos.
En conjunto, América Latina produce el 14% de los alimentos de todo el mundo, de acuerdo con Endeavor. Sin embargo, los altos costos que representa para los agricultores la implementación de tecnología, así como la falta de preparación para adoptarla y el poco acceso a capital, dificultan emprender en agricultura.
La comunidad de agtech nacional está formada por 127 empresas enfocadas principalmente en biotecnología, bioproductos y biocombustibles (27%), agricultura de precisión (15%), y protección de cultivos y animales (13%). Un análisis del mismo reporte concluye que Jalisco es el estado con mayor viabilidad para formar un agro-clúster con el fin de impulsar los emprendimientos de agrotech.
Además de estos retos, en nuestro país, el 89.1% de los trabajadores del campo tiene como grado máximo de estudios secundaria y la mayoría vive en condiciones de pobreza. Por otro lado, existe una gran cantidad de intermediarios, situación que dificulta el pago justo por sus cultivos y por lo tanto, la posibilidad de invertir en tecnología.
Bajo estas condiciones, han surgido redes de apoyo y agro-clústers que impulsan y concentran proyectos de comunidades o productores de un mismo sector, con el fin de derribar estas barreras. Entre ellos:
En su mapeo de emprendimientos en el ecosistema de agrotech en México, Endeavor considera a todo emprendimiento que desarrolle o implemente algún tipo de tecnología en agricultura y que aporte beneficios en cualquier etapa de la cadena de suministro.
Incluye software, sensores, analíticos por monitoreo aéreo o satelital, marketplaces con base digital como canal de distribución, biotecnología, biocombustibles, y herramientas tecnológicas para la gestión de procesos.
Este análisis reveló que la mayoría de los emprendimientos dedicados a la tecnología en agricultura se encuentran en la etapa de crecimiento y expansión (55%) y después, las empresas listas para escalar (25%). En cuanto a su tamaño, el 57% son microempresas (1 – 10 empleados) y el 31% son pequeñas empresas (11 – 50 empleados).
Estos negocios en agrotech se clasifican en tres diferentes etapas de acuerdo al momento en que se ofrece la solución:
Se destaca que en la comunidad mexicana de agtech, el 24% de los emprendimientos generan el 80% del total de empleos del sector. Como ejemplo del potencial de emprender en tecnología en agricultura podemos enlistar a:
Esta empresa de tecnología para la agricultura se dedica a la innovación en fabricación, investigación de nuevas moléculas, desarrollo y comercialización de productos inteligentes para mejorar la productividad en el campo. Tiene un centro de innovación y seis fábricas que les permiten distribuir en México, Estados Unidos, República Dominicana, Colombia, Venezuela, Perú, Chile y Argentina.
Gruindag International ofrece soluciones de inocuidad, plaguicidas y nutrición vegetal. Con una amplia experiencia en el diseño y la fabricación de especialidades químicas y bioquímicas para la industria y la agricultura.
Con ayuda de Big Data, desarrolló una tecnología a través de información climática y satelital para emitir recomendaciones de riego, basadas en datos. Dicha estrategia de riego está definida por la cantidad de Agua Útil (AU) del lote, los pronósticos climáticos, así como el tipo de cultivo, entre otros factores.
Entre los clientes de Kilimo existen productores de cerezo, palto, cítricos, nogales, vid, maíz, trigo, soja, caña de azúcar, entre otros. La empresa originaria de Argentina ha logrado ahorrar más de 19 billones de litros de agua en 60,000 hectáreas monitoreadas en siete países de América.
Esta plataforma de tecnología en agricultura está especializada en hardware IoT y software. Funge como un asesor agrícola virtual que ofrece recomendaciones concretas en tiempo real, para potenciar cultivos utilizando los recursos precisos.
Instacrops integra distintas fuentes de datos, utilizando técnicas de inteligencia artificial y visión computacional, con el objetivo de recopilar información sobre parámetros claves de los cultivos. Por ejemplo, su modelo de riego de precisión reduce el uso de agua en hasta 35%.
Este emprendimiento surgió en 2015 en Querétaro de la mano de la bióloga Adriana Luna. Consiste en la producción de insumos agrícolas orgánicos a base de biotecnología, Tierra de Monte utiliza microorganismos para producir fertilizantes naturales y orgánicos con beneficios para el ser humano y la cadena productiva.
Adriana fue una de las 30 Promesas de Forbes 2020 y recibió el premio Cartier Woman’s Initiative, otorgado a mujeres que trabajan con pasión por avances globales. Una de sus iniciativas es integrar a las mujeres en una red Agro que además de contribuir a su desarrollo profesional, también combate aspectos personales como violencia o discriminación.
Escucha la charla que tuvimos con esta emprendedora para nuestro podcast The Talk para emprender:
Involucra a pequeños productores de fresa de Maravatío, Michoacán e Irapuato, Guanajuato con el fin de acercarlos a grandes empresas. Proyecto Madre Tierra está impulsado por Danone, Altex, Technoserve, GIZ y Nuup. Ellos facilitan su acercamiento a la tecnología para que los agricultores mejoren la producción y gestión de sus pequeñas huertas, aplicando técnicas de agricultura regenerativa.
Este soporte les permite tomar mejores decisiones sobre sus cultivos de acuerdo a la información del clima. Del mismo modo, mejoran la gestión de sus finanzas con un mayor control de ingresos y gastos.
Conscientes de que el acceso a internet puede transformar vidas -y emprendimientos- están enfocados en facilitar la conectividad a internet satelital mediante una conexión local de Wi-Fi.
Su modelo consiste en llevar internet de calidad a zonas remotas del país. Aunque, Viasat no está enfocado exclusivamente en agrotech, sí ofrece una solución innovadora al campo mexicano.
Esta empresa surgió en 2018 en Irapuato, Guanajuato. Ha levantado 475 mil dólares de capital gracias a su modelo disruptivo. Su modelo de economía circular se especializa en transformar el agua residual para producir proteínas de origen vegetal.
MicroTERRA permite la adopción de métodos de acuicultura más sostenibles. Su fundadora, Marissa Cuevas ha sido reconocida por el MIT como una de las personas más innovadoras de Latinoamérica menores de 35 años.
Michoacán es considerado el principal productor de aguacate en México. En el municipio de Uruapan, surgió este emprendimiento que aplica la tecnología en la agricultura a través de una plataforma digital para conectar a los productores de aguacate con importadores en Estados Unidos. Esto con el propósito de transparentar las transacciones y eliminar riesgos en el tránsito del producto.
El sistema de AvoPrice creado por Humberto Solórzano, rastrea todas las posiciones de compra, venta y cierre y las pone a disposición de los actores del mercado internacional, además los importadores y exportadores cuentan con el respaldo de un coordinador de transacciones para monitorear la entrega.
Estos emprendedores en tecnología para la agricultura demuestran que aún hay mucho campo por explorar en este sector. En WORTEV nos encanta acompañar a emprendedores con ideas innovadoras.
Comparte tu proyecto de tecnología en agricultura con nosotros como lo hizo Víctor Albores, fundador de Lixiviado por fermentación microbiana, el afortunado ganador del segundo lugar del Premio WORTEV Chiapas. Conócelo aquí:
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